Tiempos convulsos, también para el crecimiento regional
Por Juan de Lucio (UAH)
Tras una buena mitad de año 2022, en términos de crecimiento del PIB y del empleo, en todas las CCAA, en el tercer trimestre del año se han empezado a observar síntomas de agotamiento de la actividad económica. Desde el punto de vista de la demanda interna, los datos de empleo, anteriormente incontestables, empiezan a generar debate. La inflación hace mella en el consumo, en la renta disponible y genera distorsiones sobre la actividad. La actividad inmobiliaria ha frenado su dinamismo. La inversión se ralentiza a la par que avanza la incertidumbre. Las vacaciones y la alegría se han acabado, también en lo económico.
Desde la perspectiva de la demanda externa, las exportaciones de bienes y servicios mantienen un comportamiento muy favorable, a pesar de la reducción de la demanda en los países europeos. En cualquier caso, es razonable que se produzca una ralentización tras la finalización de una excelente temporada turística. También lastran la actividad: el mantenimiento de la guerra en Ucrania, las dificultades de abastecimiento, los elevados precios de materias primas y energía, la inflación generalizada y la subida de tipos. En los países clientes, el periodo festivo acabó hace más tiempo que en el nuestro.
Desde la perspectiva regional, con el modelo de estimación adelantada de crecimiento regional mediante redes neuronales[1] se obtienen los resultados que se muestran en la figura adjunta. Se proporciona una primera estimación/predicción del crecimiento del año en curso y una predicción para 2023. En el conjunto de año 2022, las CCAA que están mostrando más fortaleza son las que tienen mayor dependencia del turismo, Baleares y Canarias han experimentado un rebote muy significativo. Madrid, Cataluña y C. Valenciana, bien comunicadas y de elevada dimensión, también han sido regiones de elevado dinamismo. Las regiones más afectadas por los cuellos de botella, los problemas de abastecimiento y por los plazos y costes más elevados en el comercio internacional son las CCAA industriales y dependientes del automóvil (Aragón, Asturias o Castilla y León).
En términos de evolución 2022-2023, se observa una intensa desaceleración en todas las comunidades autónomas. Esta desaceleración es tan brusca que algunas CCAA pueden experimentar tasas de crecimiento intertrimestrales negativas tan pronto como en el cuarto trimestre de 2022. La política económica tiene poco margen de actuación. La política monetaria es contractiva. Los fondos NGEU no han llegado con la intensidad deseada y sus efectos parece que tardarán algunos trimestres en observarse. Por su parte, la política fiscal nacional no ha reaccionado, tampoco está claro que pueda hacerlo, ante la desaceleración incipiente.
Siendo así, tras una fuerte desaceleración el segundo semestre de 2023 vendría caracterizado por una paulatina recuperación, si el contexto convulso en el que se desenvuelve la actividad económica mundial no vuelve a sorprendernos negativamente.
Fuente: elaboración propia
En cualquier caso, incluso en etapas de recuperación, el crecimiento regional sigue siendo muy inestable, con marcadas diferencias entre CCAA. Esto es así en un entorno en el que todavía están presentes los efectos de la pandemia y la actividad no ha alcanzado un nuevo punto de equilibrio. La proximidad de nuevas elecciones y el contexto geopolítico irrumpen como nuevos elementos de inestabilidad e incertidumbre económica, situación que lastra la actividad productiva. Por ello, la estabilidad interna, el consenso y el diseño de políticas adecuadas son elementos fundamentales para recuperar la actividad económica. A modo de ejemplo, la posibilidad de alcanzar un pacto de rentas que evite prolongar el actual proceso inflacionista ayudaría a no extender en el tiempo las indeseadas consecuencias de la subida de precios. Igualmente, es oportuno sentar las bases estructurales sobre las que impulsar el futuro crecimiento. En este sentido, no debemos abandonar la innovación, la investigación y el desarrollo, así como la creación de nuevas empresas con proyección de crecimiento internacional. Se acabó el verano y es el momento de trabajar para diseñar y sentar las bases de la nueva etapa de florecimiento de la economía española.
“La riqueza de las regiones” constituye un instrumento de comunicación e intercambio de ideas promovido por Asociación Española de Ciencia Regional (AECR). Para más información sobre la actividad de AECR visite su Página Web o síganos en Facebook, Linkedin, Youtube y/o Twitter.
[1] De Lucio, Juan (2021): “Estimación adelantada del crecimiento regional mediante redes neuronales LSTM” Journal of Regional Research.