La Riqueza de las Regiones (por la Asociación Española de Ciencia Regional

Las desigualdades internas en Andalucía desde la perspectiva de las rentas declaradas por IRPF.

Por Joaquín Aurioles Martín. Universidad de Málaga.

Los datos de origen fiscal están resultando particularmente útiles para el análisis económico de base territorial. Uno de los principales obstáculos para el estudio de la desigualdad interna dentro de las regiones ha sido tradicionalmente la disponibilidad de información estadística lo suficientemente desagregada desde un punto de vista territorial, por lo que la publicación de las bases imponibles del IRPF a nivel municipal proporciona una nueva vía para la profundización en el tema.

En el caso de Andalucía, la serie que publica el Instituto de Estadística y Cartografía tiene su origen en 1989 e incluye algún detalle adicional acerca de la naturaleza de las rentas declaradas. El análisis de estos datos permite apreciar algunas circunstancias de interés (ver Tabla 1). Por un lado, se observa que, en términos de rentas fiscales declaradas, las diferencias entre municipios andaluces se redujeron en el periodo 1995 -2005, pero también que este saldo es el resultado de la acumulación de dos periodos bien diferentes. En los años posteriores a la crisis de los 90 las diferencias aumentaron, pero con el cambio de siglo se inició una fuerte corrección de la tendencia que dio como resultado una reducción significativa de las desigualdades en el conjunto del periodo. Por otro lado, también se obtiene que las diferencias internas son más acusadas en las provincias orientales que en las occidentales, con Granada y Almería entre las más desiguales y Cádiz en el extremo contrario.

Tabla 1. Índice Gini. Andalucía y provincias. 1995, 2000, 2005 y 2011

1995

2000

2005

2011

Almería

0.320

0.366

0.325

0.331

Cádiz

0.253

0.241

0.203

0.205

Córdoba

0.272

0.323

0.292

0.285

Granada

0.385

0.415

0.382

0.358

Huelva

0.272

0.330

0.288

0.264

Jaén

0.267

0.315

0.280

0.260

Málaga

0.305

0.272

0.253

0.268

Sevilla

0.283

0.288

0.263

0.258

Andalucía

0.322

0.340

0.305

0.295

Quizás el resultado más relevante es que en el periodo comprendido entre 2005 y 2011 no tiene lugar el fuerte aumento de la desigualdad que cabía esperar, a la vista de la intensidad de la crisis de 2007 sobre el empleo y los segmentos de población más desfavorecidos. El resultado es, sin dudas, sorprendente, aunque pueden existir algunas explicaciones. Señalados dos de ellas.

La primera de ellas es que el análisis se centra en el estudio de las diferencias intermunicipales de renta, no interpersonales, lo que quiere decir que aunque el impacto de la crisis haya sido particularmente dramático para los trabajadores asalariados y para las rentas más bajas, su reflejo en el territorio puede seguir un patrón compatible con la corrección de las desigualdades. Conviene recordar que en uno de los primeros trabajos sobre el impacto regional de la crisis, A. Villar[1] apunta que, si bien la crisis supuso un brusco frenazo a la reducción de las diferencias regionales en España desde los años 80, no consiguió quebrar del todo la tendencia, aunque reconociendo que sus efectos por comunidades autónomas están siendo muy desiguales.

La segunda explicación tiene que ver con la propia crisis y con la singularidad de los datos utilizados para el análisis. En concreto, con la posibilidad de que, como consecuencia de la pérdida de empleos y reducción en el salario medio, se haya producido un descenso en número de declarantes y en el importe de la renta media declarada (ver Gráfico 1). Desde esta perspectiva, la corrección de las diferencias intermunicipales en rentas declaradas podría ser el reflejo de que, en términos relativos, el mayor número de bajas de declarantes se haya producido en los municipios con rentas más reducidas, y por tanto con mayor número de contribuyentes en las proximidades del umbral del mínimo exento de declaración, o donde la destrucción de empleo ha sido más acusada.

Los datos del IECA indican que el número de declarantes experimentó un fuerte crecimiento entre 1995 y 2008 (47%), pero que se estabilizó en 2008 y que incluso llegó a registrarse un ligero descenso en los dos años posteriores. La evolución de las rentas declaradas reflejó un perfil similar, aunque más acusado en las inflexiones. También en este caso, tuvo lugar un fuerte aumento de la renta media declarada entre 1995 y 2008, aunque la quiebra de la tendencia en 2008 resultó mucho más acusada. Desciende el número de declarantes, pero sobre todo el volumen de las rentas declaradas, resultando, como consecuencia de todo ello, que las diferencias intermunicipales en Andalucía, no solamente no se incrementan con la crisis, sino que se han estabilizado e incluso permiten apreciar una suave tendencia a la reducción.

Si volvemos a observar la Tabla 1 podremos apreciar algunas diferencias significativas a nivel de provincias. El proceso de moderada reducción de las diferencias se aprecia fundamentalmente en la mitad occidental de la comunidad, pero resulta bastante más convulso en la oriental. Mientras que Granada y Jaén continúan reduciendo diferencias a un ritmo comparable con el periodo anterior, en Málaga y Almería tienen lugar un ligero repunte de las desigualdades internas.

 



[1] http://decigarrasyhormigas.com/author/antoniovillarnotario/