La Riqueza de las Regiones (por la Asociación Española de Ciencia Regional

El Riesgo de Pobreza de las Comunidades Autónomas reconsiderado

El Riesgo de Pobreza de las Comunidades Autónomas reconsiderado

Por Alex Costa[1] (alexcostasaenz@gmail.com), Vittorio Galletto[2] (vittorio.galletto@uab.cat), Jaume Garcia[3] (jaume.garcia@upf.edu), Josep Lluís Raymond[4] (josep.raymond@gmail.com), Daniel Sánchez-Serra[5] (daniel.sanchezserra@oecd.org)

 

El día 1 de febrero publicamos en este Blog de “La Riqueza de las Regiones” una nota con el título “El coste de la vida en las Comunidades Autónomas, Áreas Urbanas y ciudades de España”[6]. En esa nota dimos noticia de los resultados del trabajo desarrollado para estimar para la economía española las Paridades de Poder Adquisitivo (PPA) a nivel subnacional[7].

 

La relevancia de este análisis depende, en primer lugar, de la dispersión de los resultados: cuanto más diferente sea el coste de la vida en los distintos territorios en estudio, mayor será el sesgo de suponer justamente lo contrario, esto es, que el coste de la vida es el mismo en todas las áreas subnacionales. Por ejemplo, teniendo en cuenta que estimamos (para España=100) que la PPA de Madrid es de 115,7 y la de Extremadura en 86,4, caben pocas dudas de la conveniencia de tener en cuenta estos resultados que, en este caso de valores extremo, alcanza un diferencial de casi 30 puntos porcentuales.

 

Sobre esta base, la importancia de estos resultados va en distintas direcciones. En primer lugar, en el análisis de la distribución territorial del coste de la vida. Aquí los datos más interesantes se encuentran en el nivel más bajo de la desagregación territorial: las diferencias de coste de la vida entre las Áreas Funcionales y el resto del territorio, y las diferencias en el seno de cada Área Funcional, entre los precios de la ciudad central y su corona. La nota del 1 de febrero se centró básicamente en este ámbito.

 

Hay un segundo ámbito de aplicación de las PPA, que fue de hecho el motivo principal que motivó el proyecto de estimación de las PPA nacionales del Banco Mundial, la OCDE y Eurostat: su aplicación para comparar, de forma más realista, los valores de PIB o de Renta per cápita (RFDpc) de las distintas economías. En el documento de trabajo citado se presenta una tabla con los valores de Renta per cápita de las comunidades autónomas (CCAA) antes y después de tomar en consideración las diferencias en coste de la vida. Nuevamente se constata la relevancia de esta corrección: el índice (España=100) de RFDpc de Madrid pasa de 139,6 a 113,3 cuando se corrige por PPA, mientras que el de Extremadura pasa de 88,4 a 91,9. En términos de ranking, Madrid pasa de ser la primera comunidad autónoma en RFDpc a ser la sexta, pasando a ser la primera el País Vasco, que en cambio era la tercera sin la corrección por el coste de la vida.

 

Entre otras posibles aplicaciones existe, sin embargo, una tercera aplicación que quizás sea, desde el punto de vista de las políticas públicas, la más relevante: la aplicación del coste de la vida a la hora de calcular el porcentaje de población en Riesgo de Pobreza. Esta es la aplicación que vamos a presentar en esta nota.

 

Riesgo de Pobreza  de las CCAA en PPA

El seguimiento del objetivo europeo de integración social se viene realizando a través de la tasa de Riesgo de Pobreza y/o Exclusión Social (AROPE) basada en tres indicadores: uno de carácter monetario, la tasa de Riesgo de Pobreza, y dos de carácter no monetario, la carencia material severa y la muy baja intensidad laboral.

La tasa Riesgo de Pobreza se calcula como la proporción de la población en hogares cuya renta disponible por unidad de consumo se sitúa por debajo del 60% de la mediana de la renta disponible por unidad de consumo a nivel español. Dicha medida supone fijar el umbral de pobreza en una cuantía determinada de los ingresos de los hogares, y utilizar unas escalas de equivalencia que permitan tener en cuenta la composición de los hogares y las correspondientes economías de escala en términos de gasto. A partir de los datos de ingresos de la Encuesta de Condiciones de Vida para el año 2019, la tasa de Riesgo de Pobreza se situaba en el 20,7%[8], con las cifras de ingresos de 2018. Los resultados para las CCAA aplicando un único umbral nacional en euros se recogen en la primera columna de la Tabla adjunta.

Estos cálculos suponen implícitamente que la capacidad adquisitiva de cada euro es la misma en todas las CCAA, de forma que el umbral nacional en euros permite el acceso a una misma cesta de bienes y servicios, independientemente de la comunidad donde esté el hogar. Ahora bien, la evidencia de las PPA indica que hay diferencias sustanciales de coste de la vida entre CCAA. Que el coste de la vida sea distinto significa que con la cantidad monetaria fijada en el umbral nacional no se podrá comprar la misma cesta de bienes y servicios, porque esa cesta será más cara o más barata, según el valor de la PPA de cada territorio.

¿Cómo resolver este problema? La respuesta directa es bien clara: hay que tener en cuenta la diferencia de coste de la vida y poner el umbral nacional para cada comunidad autónoma corregido por PPA. De esta forma se podrá afirmar que, con esos umbrales fijados en PPA, se puede adquirir la misma cesta de la compra en todas las CCAA, a pesar de los diferentes precios de los productos de esa cesta. Los resultados de este planteamiento se presentan en la segunda columna de la tabla adjunta.

Una alternativa para resolver el problema de la heterogeneidad regional en el cálculo del Riesgo de Pobreza ha sido calcular el tasa de Riesgo de Pobreza con umbrales regionales, esto es, calcular un umbral específico de cada una de las CCAA, teniendo en cuenta el valor de las medianas por unidad de consumo de la distribución de la renta para cada una de las CCAA[9]. Estos resultados aparecen en la tercera columna de la tabla adjunta.

El empleo de un único umbral en euros puede exagerar las diferencias en la tasa de Riesgo de Pobreza, ya que no se tiene en cuenta que en las CCAA con un nivel de renta más bajo también los precios serán algo más bajos y, a la inversa, que las CCAA con mayor renta tendran que enfrentarse con precios superiores. Tal como muestra la primera columna de la tabla, entre el valor de menor Riesgo de Pobreza (7,7%) y el mayor (31,5%) hay una diferencia de 23,8 puntos porcentuales. Cuando se tiene en cuenta el distinto coste de la vida estas dierencias quedan suavizadas. En efecto, en la la segunda columna de la tabla entre el valor más bajo (6,5%) y el más alto (28,2%) la diferencia ahora es de 21,7 puntos porcentuales.

El sistema de calcular el Riesgo de Pobreza con umbrales regionales todavía corrige más este diferencial, ya que en este caso el mínimo es de 14,5% y el máximo de 24,1%, con una distancia entre los valores extremos de 9,6 puntos porcentuales. Ahora bien, este método aplica para cada territorio una misma definición de Riesgo de Pobreza, pero no asegura en ningún caso que el nivel de vida considerado en cada una de las CCAA sea el mismo. Esto es, se aplica una misma definición del umbral, que es en realidad una medida de desigualdad, pero no hay en el cálculo la búsqueda de un nivel de vida común, una misma cesta de bienes y servicios a la que deben acceder los hogares en cualquiera de las CCAA.

La consecuencia de utilizar umbrales regionales se puede ejemplificar con el siguiente ejemplo. Si en dos CCAA el nivel de renta es muy distinto pero la desigualdad es la misma, la tasa de Riesgo de Pobreza será la misma. Este es el caso de la comparativa entre País Vasco y Galicia. La tasa de Riesgo de Pobreza con umbral nacional en euros es de 10% y 20% respectivamente. Hay el doble de riesgo en Galicia. Cuando se corrige con las PPA, teniendo en cuenta la PPA de cada Comunidad (cuarta columna de la Tabla) el diferencial se estrecha de forma significativa: ahora para el País Vasco el Riesgo de Pobreza es un 11,8% y en Galicia un 17,1% (un 50% más, no el doble). Ahora bien, cuando se aplican los umbrales regionales, como en la desigualdad de la renta es similar en ambas CCAA, las cifras pasan a ser del 20,5% en al País Vasco y del 20% en Galicia: hay mayor Riesgo de Pobreza en el País Vasco que en Galicia.

A la vista de los anteriores resultados, ¿quiere decir que el cálculo de las tasas de Riesgo de Pobreza con umbrales regionales es incorrecta? No, en absoluto. Este sistema aplica la definición oficial en Europa de Riesgo de Pobreza, y por tanto es correcta. Lo que quiere decir es que si nos referimos a un estándard de nivel de vida común para un análisis comparativo del Riesgo de Pobreza (no alcanzar ese nivel de vida), parece más adecuado un sistema con un umbral único corregido por los niveles de precios de cada territorio, lo que equivale a vincular este umbral al acceso a una cesta común de bienes y servicios expresada en términos reales.

El contenido de esta nota está desarrollado en el IERMB Working Paper in Economics, nº 20.01, November 2020 (https://iermb.uab.cat/wp-content/uploads/2020/11/IERMB-WORKING-PAPER-E-20.01.pdf).

 

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[1] Oficina Municipal de Datos. Ayuntamiento de Barcelona.

[2] Institut d’Estudis Regionals i Metropolitans de Barcelona (IERMB).

[3] Universitat Pompeu Fabra.

[4] Universitat Autònoma de Barcelona.

[5] OECD Directorate for Education and Skills. Este documento no refleja las opiniones oficiales de la OCDE o de sus países miembros. Las opiniones expresadas y los argumentos empleados son los de los autores.

[6] https://aecr.org/es/el-coste-de-la-vida-en-las-comunidades-autonomas-areas-urbanas-y-ciudades-de-espana

[7]  El documento amplio está accesible en https://iermb.uab.cat/wp-content/uploads/2020/11/IERMB-WORKING-PAPER-E-20.01.pdf

 

 

[8] Esta tasa es del 20,6% si excluimos Ceuta y Melilla, cifra relevante dado que en el cálculo de las PPA realizado en el trabajo no se incluyen dichas ciudades autónomas.

[9] En el WP del IERMB se recogen las referencias de trabajos hecho con esta óptica, como por ejemplo Faura-Martínez et al (2016); Ayala y Ruiz-Huerta (2020) y Llano (2020).