La Riqueza de las Regiones (por la Asociación Española de Ciencia Regional

Consecuencias de la crisis sobre la desigualdad y la pobreza en la sociedad Española

Por: Gustavo A. García, Josep Lluis Raymond y José Luis Roig (Universidad Autónoma de Barcelona)

Una de las consecuencias más negativas de la actual crisis es el incremento de la desigualdad y la pobreza en la sociedad española. Los datos disponibles muestran que la distribución de la renta se ha hecho más desigual desde el inicio de la crisis. Aunque esta dinámica se reproduce en los países de la OCDE es remarcable que España está entre los países donde más se ha incrementado tanto la desigualdad como la pobreza. Por otra parte, en el ámbito regional el incremento de desigualdad ha sido generalizado, aunque de diferente grado

En el artículo titulado “Distribución de la Renta y Ciclo Económico: España 2003-2011” (García, Raymond y Roig, 2014) se estudia la relación entre ciclo económico y desigualdad a través de las regiones en España en el período 2003-2011 a partir de la información de la Encuesta de Condiciones de Vida.

Los resultados muestran dos consecuencias claras de la actual recesión económica. En primer lugar, se ha incrementado la desigualdad en la distribución de la renta y, en segundo, se ha generado un incremento en la polarización (ver gráfico 1). En el período 2003-2007 de crecimientos positivos del PIB se producía una clara tendencia a la reducción de la desigualdad (el índice de Gini pasa de 0.3772 en 2003 a 0.3519 en 2007) y una clara tendencia a la reducción de la polarización: mientras que en 2003 la renta promedio del 5% de las familias más ricas era 10.2 veces superior a la renta promedio del 5% de las familias de menor renta, esta ratio se sitúa en 9.3 en 2007. Estas tendencias se truncan con la llegada de la recesión, de forma que el índice de Gini alcanza 0.3784 en 2011 y el índice de polarización se sitúa en este año por encima de 13.

Gráfico 1. Desigualdad y polarización en España

 

Una de las razones por las que la recesión económica ha provocado un aumento en la desigualdad y en la polarización es que esta recesión se ha manifestado en una destrucción de empleo y en un aumento del paro. Por otro lado, cabe destacar que la Encuesta de Condiciones de Vida se dirige a hogares. Por tanto, los “sin techo”, por definición, no están incluidos en la encuesta. La inclusión de este colectivo muy probablemente agrandaría los efectos de la recesión económica sobre la desigualdad y polarización en la distribución de la renta.

En relación a la pobreza monetaria, definida esta como el 60% de la mediana de los ingresos de los hogares, el cuadro 1 muestra el comportamiento de este fenómeno.

Cuadro 1. La evolución de la pobreza monetaria

Nota: % pobres: porcentaje de hogares por debajo del umbral de pobreza.

a Hogares con individuos de 65 y más años. b Hogares con individuos de menos de 65 años.

 

Se observa que el porcentaje de hogares pobres se ha mantenido relativamente estable en el entorno del 24%, con una leve disminución en el período de crisis 2007-2011. Una posible explicación de la caída de la pobreza vendría dada por el hecho de que las pensiones por jubilación pueden haber contrarrestado los efectos de la pérdida de ingresos por disminución de salarios o desaparición total de estos (desempleo) dentro de los hogares durante el período de crisis. De hecho, si diferenciamos los hogares con individuos menores y mayores a 65 años, se nota que en estos últimos la incidencia de la pobreza ha disminuido en casi 4 puntos porcentuales entre 2007 y 2011.

Lo que sí ha aumentado considerablemente es la intensidad de la pobreza. En concreto, y siguiendo la última fila del cuadro 1, se observa que dicha intensidad se ha incrementado en el período de análisis y con mayor fuerza durante la recesión, pasando de 8.99% en 2007 a 9.55% en 2011.

En conclusión, si bien la expansión en la economía española en el período 2003-2007 ha ido acompañada por una reducción en la desigualdad y la recesión 2008-2011 por una aumento de la desigualdad, el porcentaje de pobres no ha aumentado pero si ha aumentado la intensidad de la pobreza. Es decir, los índices de desigualdad en 2011 son similares a los de 2003, pero las familias pobres en 2011 no solamente son más intensamente pobres que en 2007, sino también que en 2003. Por otro lado, cabe resaltar que estos resultados se derivan de la utilización de un índice de pobreza relativa. En caso de emplear un índice de pobreza absoluta, la recesión claramente habría aumentado el porcentaje de pobres.

Referencias

García, G., Raymond, J. L., y Roig, J. L. (2014). “Distribución de la Renta y Ciclo Económico: España 2003-2011”, Investigaciones Regionales, 30:53-77.